martes, mayo 14, 2013

Comer frutas en las noches ¡no engorda!


Autora: : Emma Isabel Suárez Ruiz
Publicado:  en lado B, 10 de mayo de 2013

     Muchas personas piensan que solo se debe de comer frutas antes de cierta hora en la tarde, ya que si las comes en la noche “engordan” o “se convierten en grasa”. Esto es un mito.
     Las frutas contienen principalmente hidratos de carbono, conocidos popularmente como “carbohidratos”. Los carbohidratos aportan principalmente energía, misma que sirve para poder llevar a cabo las funciones básicas del organismo y las actividades diarias; pero ¿qué pasa cuando comemos carbohidratos después de cierta hora en la tarde? Siempre que comemos cualquier carbohidratos, (tales como: pan, avena, arroz, cereales de caja, tortilla, fruta, pastas, etc.) se van a convertir en “azúcar” dentro del cuerpo por medio de ciertos procesos bioquímicos. Esta azúcar es la que usa el cuerpo para obtener energía y así poder realizar todas las actividades diarias. Cuando esta energía proveniente de los alimentos no se ocupa, sin importar la hora en la cual la consumamos, nuestro cuerpo la va a guardar en forma de grasa como reserva, sin embargo, esta energía guardada en forma de grasa no siempre es utilizada por el cuerpo, a menos que se realice actividad física moderada o intensa. Entonces, si comer una fruta proporciona la misma energía que una tortilla, un pan o cualquier otro carbohidrato, ¿por qué cenamos quesadillas o tacos (que llevan carbohidratos), sin tener miedo a engordar?
     Lo ideal después de comer cualquier alimento a la hora de la cena es no ir directamente a la cama, ya que esto conduce a la inactividad física y se acumula la energía mencionada anteriormente. Es mejor cenar temprano y después realizar algunas actividades, aunque sean leves, para utilizar la energía consumida y así evitar que se acumule en el cuerpo en forma de grasa.
     Otro factor muy importante cuando comemos fruta en las tardes/noches, es cómo la estamos comiendo y cuánta fruta estamos comiendo. Como muchas personas saben, se puede comer de todo, siempre y cuando seamos personas sanas y lo comamos con medida; por ejemplo: no es lo mismo comer una manzana y un sándwich que comer toda la pieza de papaya y un sándwich. Toda la pieza de papaya aporta más energía que una pieza de manzana, si queremos comer papaya podríamos comer sólo una taza o una rebanada.
Tampoco es conveniente dejar de comer otras cosas para poder cenar un plato grande con muchas frutas diferentes, ya que tanta fructosa (el azúcar de la fruta), va a tener un gran contenido energético que no va a ser utilizado, aparte de que no aportaría otros nutrimentos necesarios para llevar una dieta equilibrada.
     Para que tu cena sea equilibrada, puedes combinar la fruta con yogurt o algún queso como el cottage, ya que estos contienen proteínas y grasas (en poca cantidad); y así estarías incluyendo en  tu comida todos los grupos de nutrimentos. Además, cuando un carbohidrato se combina con proteínas, su valor glucémico (que es la cantidad de azúcar que ese alimento eleva en la sangre) disminuye.
     Por otro lado, la cantidad de fruta recomendada es de 2-5 raciones por día, tomando en cuenta que algunas frutas como el mango, la pera o el plátano equivalen a dos raciones de fruta aunque sea sólo una pieza. Si excedes la cantidad recomendada de cualquier grupo de alimentos; ya sea frutas, alimentos de origen animal, cereales, grasas, etc.; tu consumo de calorías aumenta y ganaras peso o “engordaras” aunque no comas fruta por la tarde/noche; por lo que se recomienda que controles las raciones de todos los grupos de alimentos para mantener tu peso o alcanzar tu peso meta.
     Dejando de lado todo lo anterior, comer frutas tiene muchos beneficios. La fruta tiene un alto contenido de fibra, sobre todo en la cáscara, agua, vitaminas y minerales. La fibra y el contenido de agua te van a dar la misma sensación de saciedad que otros carbohidratos, pero con un menor aporte calórico, además de que te ayudarán a mantenerte hidratado. Además, el tener esta sensación de saciedad, va hacer que comas menos, mientras que el aporte de vitaminas y minerales te va a ayudar a mantenerte en un buen estado nutricio y por lo tanto de salud.
     Por lo tanto, comer fruta en las noches no engorda. Lo que puede hacer que subas de peso es la cantidad de fruta que comas en la cena, así como la cantidad y el tipo de los otros alimentos que consumas a lo largo de la tarde y en la noche, y por supuesto, las actividades que lleves a cabo después de cenar. Así que ya no lo pienses más, ¡Debes perder el miedo de comer fruta por las noches!

1 comentario:

Anónimo dijo...

me encanto este articulo