jueves, diciembre 15, 2011

Leer-se: ser y leer.



Autora: Marisol Aguilar Mier
Publicado: Puebla on Line, 14 de diciembre de 2011.

     ¡Leer…! La lectura ha sido el tema de estos últimos días. Todos hemos sido espectadores de una avalancha de bromas, reflexiones y críticas severas suscitadas a propósito de cierto hecho ocurrido recientemente en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. Pero más allá de preferencias políticas y de una que otra buena carcajada, se ha tocado un punto muy importante que merece ser tomado en cuenta en este contexto que, nos guste o no, evidencia la incipiente cultura del libro que tenemos en nuestro país. Empecemos por algunos datos:
Según la Encuesta Nacional de Lectura del 2010 (CONACULTA), los mexicanos leemos en promedio 2.9 libros al año. Dato que varía según la edad, el género, la escolaridad y el nivel socioeconómico de las personas. Por su parte, el INEGI reportó que 56% de los encuestados lee libros, 31% ha leído un libro en algún momento de su vida y un 13% dijo nunca haber leído un libro. Como podemos apreciar, sólo poco más de la mitad de los mexicanos son lectores activos, y además, otros estudios señalan que la razón principal para leer está relacionada con “informarse” o por “motivos escolares” (más que por gusto, recreación, crecimiento o aprendizaje), incluyendo en estos números a los libros de texto. Y cabe mencionar, que menos del 20% se dedica a esta actividad en su tiempo libre, a diferencia de la televisión, donde la cifra se duplica (41%).
     
Lo anterior representa una enorme dificultad pues hoy por hoy, dentro de la llamada sociedad del conocimiento, no podemos ignorar que la lectura es indispensable para sobrevivir pues existe una gran cantidad de información que requiere ser manejada, comprendida, analizada, enjuiciada y valorada.
     

Por ello, debe comprenderse a la lectura de manera mucho más amplia pues no es una cuestión mecánica ni instrumental que se reduce a una simple decodificación. Tampoco se limita a lo escolar o a usos académicos o laborales exclusivamente. Sus alcances son mucho más profundos. Leer consiste en un proceso de interpretación y construcción donde confluyen operaciones perceptivas, emocionales, intelectuales y sociales por medio de las cuales se extraen y otorgan significados. Por lo tanto, abarca múltiples dimensiones a través de las cuales el ser humano se informa, se comunica, se forma, se recrea, se reconstruye y resignifica.
De esta manera, al leer se van involucrando en un proceso psicolingüístico de carácter personal y social, elementos cognitivos, afectivos, valorales y creativos. Al realizar una actividad visual, de manera refleja y simultánea se desarrolla la identificación de palabras (percepción), la reproducción de lo leído (memoria), la reflexión y crítica en torno a sus contenidos (análisis), la utilidad y aplicabilidad de éstos en la vida de la persona (creatividad), la búsqueda de respuestas (imaginación) y la reinterpretación de la realidad y de uno mismo (construcción). Este gran despliegue de actividades que provoca la lectura a nivel cerebral, da como resultado una mejoría en la calidad y el desarrollo de las habilidades del pensamiento. Existe por lo tanto, una estrecha relación entre leer, pensar y aprender pues el lector al irse experimentando como tal, al comprender un texto, va construyendo su propio significado, redescubriéndose a sí mismo, de manera integral.
     
Por el contrario, la deficiente comprensión lectora, constituye un obstáculo para el aprendizaje y suele conducir al alumno a la pasividad, al sin sentido escolar, a la apatía y a la falta de compromiso. Nos dice Paulo Freire al respecto que hay muy pocos estudiantes que reflexionan sobre lo que leen y por consecuencia, no generan nuevas ideas careciendo de creatividad pues no son constructores de su propio conocimiento.
     
Por ello, puede afirmarse que leer bien transforma a la persona porque implica una interpretación y reescritura propias provocando una nueva lectura de la realidad la cual es re-significada constantemente. Incluso, se dice que ésta actividad puede llevarnos a una práctica para la libertad pues nos ayuda a tomar conciencia para un actuar distinto en el mundo.
      
Queda entonces un gran reto no sólo para las instituciones educativas, sino principalmente para la familia pues es en los primeros años de vida donde se puede promover en los niños y niñas una actitud de curiosidad e indagación constante, un gusto por aprender y descubrir nuevos horizontes y nuevas perspectivas a través de la lectura.
     
A manera de conclusión y como dice Fernando Savater no hay que olvidar que (para bien o para mal) “gran parte de lo que somos se lo debemos a la lectura”.
     




miércoles, diciembre 14, 2011

Noche de paz, ¿noche de amor?



Autora: Rocío Barragán de la Parra
Publicado: La Primera de Puebla, 14 de diciembre de 2011

      Noche de paz, noche de amor, todo duerme en derredor, entre los astros que esparcen su luz, bella anunciando al niño Jesús, brilla la estrella de paz?? El tiempo de villancicos, árboles de Navidad, nacimientos, esferas, escarcha, coronas de adviento, foquitos de colores y cualquier tipo de adornos y figuras de la época cunden los hogares y las calles de la ciudad.
     Desde hace más de un mes los aparadores se encuentran con ofertas y promociones, el buen fin y las ventas nocturnas son sólo algunas de las estrategias comerciales que buscan atraer a los consumidores para adquirir los productos y servicios propios de la temporada decembrina.
      La invención del ?Maratón Guadalupe/Reyes? es un ejemplo claro de la vinculación de las festividades de esta temporada al excesivo consumo enmarcado por los tradicionales convivios, intercambios, festejos y vacaciones y ante este escenario ¿dónde están las tradiciones de la época con todo el arraigo cultural y fervor religioso?. Tal parece que la temporada navideña se ha convertido en un espacio que estimula y privilegia el consumismo, la compra emocional e impulsiva de artículos dispendiosos, costosos y en su mayoría innecesarios.
      Para entender mejor este fenómeno basta recordar la transición de algunas de estas tradiciones como las posadas que formalmente iniciaban el 16 de diciembre y a través de letanías se pedía posada nueve días previos al Nacimiento de Jesús. En la actualidad esta festividad se anticipa con las pre-posadas y los cantos han sido sustituidos por la fiesta y las bebidas alcohólicas.
      El 12 de diciembre es también una de las festividades más emblemáticas en la Iglesia Católica, este día se conmemora la aparición de la Virgen de Guadalupe y se ha convertido en un gran escaparte desde el que se ofertan miles de productos para los feligreses que se desplazan en diferentes puntos del país en esta conmemoración.
      Las tradiciones para despedir el año viejo y recibir al naciente representan una excelente oportunidad para que prestadores de servicios ofrezcan innumerables alternativas de shows, cenas, bailes y espectáculos que permiten a los comensales integrarse a un ambiente festivo con un paquete todo incluido.
      El 6 de enero enmarca la tradición infantil más importante, la llegada de los Reyes Magos; cuenta la tradición que éstos visitaron al Niño Jesús en Belén para obsequiarle oro, incienso y mirra y así honrarlo como Rey, Dios y Hombre. En memoria a este hecho es que en la actualidad la noche del 5 de enero cada niño expresa en una carta los presentes que desea recibir prometiendo enmendarse y ayudar más en casa o hacer sus labores escolares. Esta actividad genera un enorme movimiento económico en los establecimientos comerciales que se preparan con antelación para tener en existencia toda la variedad de juguetes, accesorios, ropa y aparatos electrónicos.
     La rosca de reyes es otra costumbre que implica, en caso de obtener una réplica de la imagen del niño Jesús en la rebanada de pan, responsabilizarse por los tamales y el atole del dos de febrero para lo cual, desde semanas anteriores, las panaderías y tiendas de autoservicio ofrecen una extensa variedad.
      Este ciclo de festividades concluye el dos de febrero día de la Candelaria, cuando se conmemora que al cumplirse 40 días del Nacimiento de Jesús éste es presentado al templo; actualmente se estila ataviar las imágenes del Niño Dios con la extensa gama de vestidos y accesorios que van desde sencillas túnicas hasta elaborados trajes de la selección nacional o uniforme de los principales clubes de fútbol; lo que implica otra gran derrama económica entorno a las zonas de mercados municipales y mercerías.
      La época representa una excelente oportunidad para comprar, utilizar el ingreso económico adicional -aguinaldo, bono, vacaciones o compensación ? para aprovechar las múltiples novedades y ofertas que el mercado presenta, sin embargo es importante reflexionar sobre los efectos que esta conducta consumista conllevan ya que, cuando la construcción de relaciones se basa en el tener u obtener sólo se propician interacciones superfluas y encuentros fortuitos.
      La construcción y el fortalecimiento de los lazos afectivos personales, familiares y sociales no obedecen al intercambio de presentes, a la convivencia en lugares especiales o a una época especifica del año. La integración personal, familiar y social se construye cada día con lo que cada uno de los seres humanos alimenta y comparte desde su cabeza y su corazón, se trata de responsabilizarse diariamente por lo que se decide hacer y adquirir reduciendo la influencia de los estímulos publicitarios e incentivando el consumo responsable y solidario.
      Cada quien decide qué quiere comprar, dónde y bajo qué condiciones lo quiere obtener y qué uso le va a dar a eso que adquiere o consume; formarnos en una cultura de consumo responsable que privilegie los intercambios de valor y el bienestar del cliente.

lunes, diciembre 05, 2011

El Área de Síntesis y Evaluación en Ibero un espacio académico de fiesta y orgullo


Autora: Laura Angélica Bárcenas Pozos
Publicado: La Primera de Puebla, 01 de diciembre de 2011

     Mucho se ha hablado de evaluar competencias, tal vez y sin darnos cuenta en la Ibero se han creado los espacios ideales para valorar el desempeño de los alumnos en situaciones profesionales reales a través de los proyectos del Área de Síntesis y Evaluación.
     En el año 2005 la Ibero Puebla echó a andar una propuesta curricular con un enfoque en competencias que significó todo un cambio de la estructura curricular en la institución que se llamó la Nueva Estructura Curricular (NEC). Entre otros cambios la NEC eliminó los procesos de titulación y en su lugar se construyeron tres espacios curriculares a lo largo del proceso profesional que se insertaron en casi todos los planes de estudio en el tercero, sexto y octavo semestre.
     Estos espacios curriculares llamados de síntesis y evaluación, han buscado que los alumnos hagan tres altos en el camino, durante su formación profesional y a través de un trabajo o proyecto de investigación demuestren sus aprendizajes, además de que sinteticen y evalúen su proceso hasta ese momento. Los diseñadores de la NEC no sabían cuál iba a ser el impacto del ASE hasta que estos empezaron a suceder.
     Al evaluar el desempeño de los alumnos, nos fuimos dando cuenta que el ASE es un espacio curricular privilegiado, pues permite observar cómo los alumnos han avanzado en el desarrollo de sus competencias, pues continuamente deben demostrar desempeños en la solución de proyectos o en la realización de investigaciones, además se refleja cuáles son las debilidades curriculares de los programas y hasta qué problemas de gestión se están presentando en la implementación del currículo.
     A lo largo del semestre los alumnos hacen un proyecto o una investigación que sus profesores, responsables de esta área, han ideado para que puedan demostrar qué tan bien han desarrollado sus competencias genéricas y específicas, así que es importante que el proyecto incluya conocimientos, habilidades e incluso actitudes. Durante el semestre el alumno puede valorar qué tanto ha ido avanzando y qué dificultades tiene para desarrollar los proyectos propuestos para el ASE. Al término del periodo académico los alumnos se someten a un jurado en donde demuestran cómo hicieron su proyecto y el producto que lograron. Casi siempre estas presentaciones se realizan ante un jurado y son públicas, por lo que  la comunidad universitaria puede acercarse y ver los avances de los alumnos. 
     Los profesores del ASE pueden detectar en qué asignaturas hay deficiencias e incluso si esto tiene que ver con infraestructura o con el desempeño del profesor, convirtiéndose el ASE en un espacio que no sólo evalúa a los alumnos sino también a los docentes y a la propia institución. A partir de lo que se hace evidente en estos espacios, se van tomando decisiones para la mejora de la implementación del currículo.
Los docentes responsables del ASE, en una muestra de creatividad pedagógica, han ido ideando formas de desarrollar este espacio académico que no tiene contenido específico, pero sí intencionalidades de aprendizaje y de evaluación muy definidas, que no eran tan claras cuando se diseñó la NEC pero que con el paso de los semestres han ido tomando forma. Los Departamentos de Arte, Diseño y Arquitectura, así como de Ciencias e Ingenierías han sido los más vanguardistas al respecto.
     Sin embargo Ciencias de la Salud y Humanidades no se han quedado atrás y han ido mejorando y perfeccionando el ASE hasta el punto que se ha ido convirtiendo en un espacio de fiesta y orgullo institucional.
Del mismo modo los tres ASE a veces están ligados, es decir, el alumno inicia un proyecto en el primer momento, lo continúa en el segundo y lo concluye en el tercero. Pero también puede ser que haga proyectos diferentes en los tres momentos y que unos sean más interdisciplinares y otros más específicos.
     Otras modalidades interesantes, es que los alumnos deben demostrar su capacidad para trabajar en pequeños grupos, haciendo procesos más colaborativos o bien pueden hacer procesos más individuales, sin embargo una fuerte intencionalidad de los proyectos del ASE es que tengan clara pertinencia social, considerando siempre a los menos favorecidos.
      En todos los casos los estudiantes están demostrando que tan competentes van siendo y qué les falta por desarrollar para ser profesionales exitosos al servicio de los otros, principalmente los menos favorecidos, para que se cumpla una de las premisas más altas de la misión de nuestra casa de estudios que es “Formar hombres y mujeres capaces para los demás”.


Las lecciones de PISA y el 2012: ¿Habrá por fin una reforma educativa real?


Autor: Martín López Calva, datos del autor haz clik aquí
Publicado: e-consulta, 29 de noviembre de 2011

     "El cambio educativo comienza cuando uno decide cambiar y cambia cuando uno cambia".
     Eduardo Andere.[1]
     A pesar de que la ley lo prohíbe, las pre-campañas de los aspirantes a la presidencia están ya en pleno desarrollo. Los llamados "aspirantes" aparecen continuamente en los medios de comunicación electrónica, en la prensa y en las redes sociales, además de estar presentando sendos libros donde formulan de una manera más o menos explícita su proyecto de gobierno para el próximo sexenio.
      De manera que no resulta ocioso o prematuro preguntarse por el lugar que ocupará la educación en las agendas de los candidatos y del futuro presidente o presidenta de México. ¿Habrá por fin, después de tantos intentos fallidos, una reforma educativa real que cambie de fondo las estructuras y reglas de funcionamiento de nuestro muy anquilosado e ineficiente sistema educativo? Como dice Eduardo Andere en la introducción de su libro sobre Finlandia y el éxito de PISA, el cambio educativo comienza cuando se decide cambiar y hasta ahora los gobiernos priístas y panistas que ha tenido el país en las últimas décadas no parecen haber querido el cambio a pesar de que cada período presidencial los discursos hablen de él.
      Hasta ahora los discursos de los precandidatos no se han caracterizado por priorizar la educación como un elemento fundamental para la transformación social que se ha mostrado en otros países. Sin embargo, como muestran muchos estudios incluyendo este libro, es posible, si se decide realmente cambiar la educación, lograr resultados en tiempos relativamente cortos y que estos resultados en la calidad educativa tengan un impacto en la transformación social.
      De manera que sería importante que los asesores de los candidatos presidenciales estudiaran a fondo las investigaciones realizadas y que la sociedad civil les exigiera incluir en sus proyectos de gobierno la reforma educativa urgente, como un elemento de alta prioridad.
      El libro de Andere muestra por ejemplo, algunos elementos cruciales que han sido la clave para el éxito del sistema escolar de Finlandia, que es el país que consistentemente ha ocupado el primer lugar en PISA. Estos cambios no implican un incremento al presupuesto destinado a la educación sino una reorganización radical de la manera en que estos recursos se invierten para lograr resultados educativamente relevantes.
      Algunos de estos elementos centrales son: Una real descentralización del sistema que otorga autonomía de decisión y gestión a los centros educativos, una política muy exigente y consistente de profesionalización de los docentes con una política de confianza en su labor, un currículo nacional basado en estándares meta cuyos detalles de instrumentación se dejan a las localidades, escuelas y maestros, y finalmente, un sistema educativo equitativo que centra sus mayores esfuerzos y atención a los educandos con más necesidad de ayuda pedagógica.
      La eliminación de las instancias burocráticas intermedias de supervisión escolar, el cambio radical de una ley que norma el currículo (de arriba hacia abajo) a una ley que surge del currículo y lo fundamenta (de abajo hacia arriba), la confianza y autonomía a los docentes después de una muy exigente formación universitaria y el énfasis en la equidad en el aprendizaje son elementos que han contribuido al éxito educativo de Finlandia y que podrían ser instrumentados si hubiera en México una verdadera decisión de cambiar y si los funcionarios responsables del gobierno educativo cambiaran sus criterios y perspectivas.
      Un gobierno educativo a cargo de la SEP, un sindicato fuerte pero orientado a la defensa de los intereses legítimos de los docentes y no a las decisiones de política educativa, un cuerpo docente altamente calificado a partir de una reforma a las instituciones y procesos de formación de profesores y una real descentralización que otorgue facultades a los maestros y a los directores con la participación de los padres de familia en el incremento de la calidad educativa serían posibles si el escenario cambiara y el magisterio no fuera solamente un surtidor de votos que negocia el candidato aliado a cambio de cargos públicos y los educandos no fueran vistos meramente como entes pasivos a indoctrinar para que todo siga igual.






¿Estudiantes profesionales?


Autora:  Luz del Carmen Montes Pacheco, datos del autor haz click aquí
Publicado: en Lado B, 29 noviembre de 2011

     El ser humano por naturaleza aprende y en la sociedad se han diseñado mecanismos para que esa habilidad innata se aproveche a través de un proceso formal, consciente y sistemático, que operativamente, consiste en que una persona tiene que asistir a la escuela por muchos años.
     En nuestro país es un hecho ya que la ruta educativa obligada será desde el nivel de preescolar hasta el bachillerato. Al terminar el bachillerato se supone que se está preparado para integrarse al mundo laboral o para iniciar un proceso educativo más que lo calificará para desempeñarse en un ámbito profesional.
     Dicha calificación u obtención de grado amerita un gran festejo en el que realmente hay una graduación, en el sentido estricto y no como erróneamente se entiende para otros niveles educativos anteriores, aunque eso es harina de otro costal.
De regreso a la graduación. En este acto, en los discursos más importantes a nivel internacional, los oradores han dicho a los recién graduados que su preparación formal no ha terminado, tienen que seguirse preparando. Y esta recomendación no implica el aprendizaje normal en la práctica laboral o en los espacios personales, por distinguirlos de alguna manera.
     Después de tantos años de ir a la escuela y graduarse, se abre un enorme panorama de posibilidades: diplomados, especialidades, maestrías, doctorados y un sinnúmero de cursos y talleres de actualización. Amén de una extensa oferta de programas que no siempre están relacionados con el ámbito laboral, desde el mejoramiento de la imagen de un profesional, hasta el desarrollo humano.
     La graduación de licenciatura ya no es la culminación de la vida escolar. Parece que ya no se estudia para vivir, se vive para estudiar. Aspecto que, como muchos otros, tiene al menos dos lecturas.
     El negativo, que se da cuando estudiar una licenciatura ya no es suficiente. Casi por inercia los nuevos licenciados- y sus padres- programan con anticipación los estudios de maestría. Algunos posibles riesgos son: estudiantes de maestría con experiencias limitadas que dificultan el diálogo requerido en un posgrado, una excesiva oferta sobre-calificada para las necesidades productivas de nuestro país y salarios bajos para perfiles altos, entre otros.
    El positivo, en que se tienen estudiantes de maestría que una vez que se han probado laboralmente, quieren ser mejores en lo que hacen o quieren dar un giro a lo que hacen.  
    Las personas que se insertan en el mundo laboral, después del bachillerato o de la licenciatura, pueden decidir a partir de su experiencia la meta y el rumbo a tomar. La intención de continuar su educación depende en mayor medida de sus intereses, de sus necesidades, de sus debilidades y de sus fortalezas.
     La superación personal y laboral depende del sujeto que aprovecha sus recursos y sabe lo que quiere y cómo lograrlo. El grado por el grado o el curso por el curso no garantizan la movilidad ni el bienestar social. La pertinencia y relevancia en estas decisiones es un factor clave.
    El botón para la muestra. En el famoso discurso para graduados de Stanford, del famoso Steve Jobs; discurso desarrollado en tres historias, hay dos mensajes que fortalecen las ideas de este escrito. En la primera historia la idea principal es que aún abandonando oficialmente sus estudios, continuó preparándose con base en sus intereses, su intuición y su curiosidad; con el paso del tiempo, hizo conexiones que aprovechó para sus desarrollos. En la segunda historia, habló del amor y la pasión que se siente por lo que se hace. Resalta la presencia de la fe, el amor en lo que hacía y la asimilación de la derrota como una oportunidad.
     No hay que abandonar la universidad – hay contadísimos Steve Jobs- hay que aprovechar lo que en las universidades se ofrece, con interés, curiosidad e intuición, para hacer mejor lo que se hace o lo que se quiere hacer y ser.
Solo los profesores universitarios y los investigadores están obligados a ser estudiantes profesionales, por vocación, por amor y por pasión en lo que hacen.
Para el resto de las personas, profesionales o no, tiene que haber formación permanente, educación continua o formación para la vida. Modalidad con valor curricular formulada para actualizarse, especializarse o como complemento en un área especializada.
Y es en las universidades donde hay que trabajar para que los estudiantes sean más conscientes de estos escenarios y del poder de decisión que tienen. Sí posgrados, pero elegidos a partir de la experiencia. Sí formación continua, pero como una oportunidad para regresar a la universidad para mejorar lo que se hace y lo que se es.
     Sí aprendizaje para toda la vida en casa, con la familia, con el resto de la comunidad. Sí lecturas y diálogos inteligentes y críticos con las parejas, con los padres, con los hermanos y con los hijos de cualquier edad. Aprendizaje útil e indispensable para la movilidad y el mejoramiento social. Más importante que la obtención del grado es el ser humano que quiere aprender para ser mejor y mejorar la sociedad.

Colapsa el modelo económico mundial… ¿Y ahora qué?


Autora: Betzabé Vancini Romero
Publicado:  en Lado B, 22 noviembre  de 2011

     Desde hace ya varios meses, nos encontramos ante la clara muestra del fracaso y colapso del modelo económico predominante en el mundo occidental: el capitalismo. No son pocos los ejemplos que podríamos citar para observar en casos tangibles como es que este modelo, tan sostenido durante muchos años y depositario de actos incluso de fe por parte algunos países, ha venido colapsando estruendosamente en tan poco tiempo. Desde la crisis económica mundial, originada por la crisis económica en Estados Unidos hasta el paulatino agotamiento de las reservas petroleras no sólo en América Latina, sino en los países de Medio Oriente, comienzan a darnos este aire nostálgico y una especie de sabor pre-apocalíptico.
     Si revisamos un poco la historia de la humanidad, han sido ya varios modelos los que han colapsado y han tenido que ser sustituidos por versiones más recientes, actualizadas o adaptadas de su centro de operación. Desde el feudalismo hasta el socialismo, cada uno ha caído y ha permitido a su vez, el surgimiento de nuevos modelos que han mantenido la actividad económica en el mundo. El último de estos modelos fue el tan afamado capitalismo, -“neo-liberalismo” según algunos autores-, modelo que centró toda su fuerza y sistema de creencias en el grande, místico, mágico, maravilloso e ‘inagotable’: mercado. El mercado, que ha resultado ser todo, menos cualquiera de los adjetivos anteriores, ha permitido y propiciado la perpetuación de la distribución inequitativa de la riqueza, la aparición de monopolios, de explotación, la búsqueda constante de las grandes empresas trasnacionales de mano de obra barata que bien puede ubicarse en China, Tailandia, Indonesia, Turquía, Guatemala, y por supuesto, en México.
     El capitalismo tan idolatrado por unos y tan criticado por otros, ha caído en cama enfermo de algo que no se recuperará jamás, yace ahora con respirador artificial y sus últimos síntomas aluden a la crisis política en varios países, el estertor de la estabilidad en Grecia, el desempleo masivo en España y por supuesto, la economía de Italia que pende de un hilo. Más cercano a nosotros tiene manifestaciones tan tangibles como el alza constante en el precio de la gasolina, en los productos de la canasta básica, de los productos de consumo cotidiano en el supermercado –ahora, incluso tener mascota comienza a volverse incosteable-, y por supuesto “El buen fin”, que según argumentó el mismo gobierno federal tuvo como objetivo “reactivar la economía en el país”. Es así, en un país como el nuestro, que depende paternalmente de Estados Unidos y de su constante inestabilidad económica, que incluso el gobierno tuvo que crear un fin de semana de descuentos y remates para que en el frenesí pre-navideño, la población reactivara la economía gastando sus adelantados aguinaldos, sobrecargando sus tarjetas de crédito y en el mejor de los casos, dejando su quincena en tiendas trasnacionales o en grandes almacenes pertenecientes al Grupo CARSO. Pero, Grupo CARSO no necesita más dinero ¿o sí?
Del “buen fin” quedaron fuera los productores, las comunidades, los artesanos, los pequeños restaurantes, las tiendas de la esquina, los destinos turísticos rudimentarios, es decir, todos aquellos que de por sí operaban al margen del capitalismo, subsistiendo de lo que las grandes operadoras comerciales dejan del ya muy afamado mercado. En este buen fin, la derrama económica llegó a los centros comerciales, pero no a las comunidades, definitivamente no a los productores, quienes cada día tienen que dar todo mucho más barato, y no precisamente por descuentos de fin de año.
     Estrategias como esta son el paliativo del agonizante capitalismo, sin embargo, vayamos considerándolo como eso: un paliativo previo al inevitable fin. Y quizá aquí lo que más preocupe no sea el colapso del modelo económico mundial, sino ¿qué vendrá después? ¿cuál será el modelo que podrá sustituir a este que también resultó ineficiente y mortal? La preocupación no es que este se acabe, sino que no tenemos listo a un suplente. 
    No hay ni siquiera asomo de un nuevo modelo que pudiera ser el sustituto inmediato o bien, el cambio remedial a todos los daños que ha causado el capitalismo no sólo a la población, sino también a la ecología del planeta.
     Parece que por allá, a lo lejos, desde la tierra donde nace el sol, comienzan a despuntar y destacarse China e India. Quienes parecen postularse para ser los próximos dueños del mercado. China abriendo sus fronteras y con su inigualable capacidad de producción e India con su impresionante avance tecnológico. ¿Será que el próximo modelo económico estará también vinculado a la religión? La actividad en la mayor parte de los países orientales está ordenada a su ancestral sistema de creencias. ¿Y qué pasará con occidente? ¿Qué pasará con el sistema de creencias, con los créditos hipotecarios, con los dueños del mercado? ¿Qué sucederá con países como el nuestro en los que la política está dirigida y manejada por las leyes del mercado?
     Creo que algunos más compartirán la percepción de que lo más grave de todos los sucesos de la actualidad, no es el colapso del modelo capitalista, sino que todos los previos a él demostraron su ineficiencia y por lo tanto no podemos retomarlos, y peor aún, que no se vislumbra claramente otro modelo económico mundial, en un futuro cercano. Supongo que en este ánimo de cambio, sólo nos quedará apelar a nuestra capacidad de adaptación, otra vez Darwin tenía razón. Observemos entonces, nuestras ciudades, las grandes campañas publicitarias y las grandes “ofertas”, observemos en la mano nuestros plásticos de dieciséis dígitos, pues quién sabe hasta cuándo dejarán de ser todopoderosos para convertirse en un mero recuerdo del pasado.



martes, noviembre 29, 2011

Acentuación de pesadilla


Autora: Luz del Carmen Montes Pacheco, datos del autor haz click quí
Publicado: Síntesis Puebla,  04 de noviembre de 2011

     Muchísimos documentos escritos como reportes de ejecutivos, presentaciones de investigadores en congresos, trabajos escolares, trabajos para obtener el grado de licenciatura, maestría o doctorado y aun titulares de medios impresos, carecen de acentos en las palabras escritas con mayúsculas.
     Cientos de generaciones de escolares, casi sin importar el nivel educativo, creen firmemente que las mayúsculas no se acentúan ¿De dónde proviene esta creencia? Es difícil asegurarlo, pero es altamente probable que se origine en las escuelas.
    Las mayúsculas sí se acentúan. Las academias de la lengua española nunca han establecido una norma que permita la falta de acento en palabras escritas con mayúsculas; al contrario, en todos los textos en los que se hace alusión a estas reglas se especifica que las mayúsculas se acentúan igual que las minúsculas.
       Incluso hay quien escribe mensajes electrónicos sólo con mayúsculas porque cree que incurre en menos errores ortográficos. Y no considera la jerga de los medios electrónicos, en la que un texto escrito así equivale a gritarle a la persona a la que se le envía el mensaje. Por cierto, cuando se nombra un archivo electrónico se omiten tanto los acentos como signos que dificulten la recuperación del archivo en caso de pérdida.
      En general, hay muchos errores recurrentes de acentuación, sobre todo en palabras que los correctores automáticos no reconocen porque las palabras existen con y sin acento. Y i el colmo!, la culpa se le atañe al procesador de textos.
       La población en general no se ocupa ni se preocupa por estos "detalles" de la lengua que habla y que escribe, postura que puede ser comprensible aunque no justificable. Pero en el caso de los profesores esta conducta es imperdonable.
      Es más, no deben contratarse profesores que no dominen las reglas ortográficas básicas y se debe instituir un curso obligatorio de actualización cada vez que las academias de nuestra lengua hagan cambios en las reglas ortográficas.
        En las escuelas hay que trabajar con las ideas de las personas, pero trabajar con ideas mal escritas es una pesadilla que dificulta muchas de las actividades educativas y que quita un tiempo valioso.


viernes, noviembre 25, 2011

Pervertidos... pero con buenos sentimientos


Autor: José Rafael de Regil Vélez, datos del autor haz click aquí
Publicado: Síntesis Tlaxcala, 24 de noviembre de 2011

     Se ha vuelto automático y satisfactorio: en el restaurante como por instinto hacemos gala de la aritmética desde niños aprendida y raudos calculamos el 10% dejaremos de propina; en el supermercado, la gasolinera, los estacionamientos hurgamos los bolsillos para encontrar las monedas que recompensarán la labor de los "cerrillos", los "viene viene" o los despachadores.
      Nos mueven la inercia de la costumbre, del "todos lo hacen", y no es menos cierto que los buenos sentimientos dinamizan nuestra solidaria acción. El "grillito" de la conciencia acecha para reclamar a nuestro egoísmo si tan sólo se asoma como rayo por nuestra mente la posibilidad de pasar de largo ante la amable atención de la que hemos sido objeto.
      Me gusta el verbo pervertir porque significa no sólo hacer cosas "sucias" y feas que atentan contra las buenas costumbres, con connotaciones sexuales, sino porque sirve para expresar -como lo dice su etimología, pervertere- cuando se pone lo de arriba abajo, cuando se trastornan las cosas; pervertir es, en este sentido, "perturbar el orden o el estado de una cosa".
      Creo que si nos detenemos a considerarlo con alguna calma, sin sentimentalismo fácil, prácticamente todos somos pervertidos. Resulta que hemos permitido que las empresas como autoservicios, restaurantes o gasolineras, y sus directivos nos transfieran su responsabilidad en lo que a empleo y pago de salarios justos se refiere. Somos pervertidos cuando asumimos ese deber abandonado por otros; ellos son pervertidos cuando con ignorancia supina se desentienden de los trabajadores que dejan encomendados a la salvadora propina, que les quita molestias legales.
      Un ejemplo: Wal Mart ha sido en México y Centroamérica una empresa altamente rentable, incluso en medio de la incertidumbre económica de los últimos años, no tendría por qué renunciar a las obligaciones que le requiere tener el personal necesario para atender con calidad a sus clientes y eso incluye a quienes empacan la mercancía.
      Emmanuel Mounier hablaba por allí de la primera mitad del siglo XX del DESORDEN ESTABLECIDO, y se refería con ello al orden que en una sociedad irresponde a la dignidad de la persona y que hace pasar como bueno y deseable aquello que no humaniza. Es algo sutil, que se va colando en el estilo cotidiano de vida y que pervierte las relaciones entre las personas y de éstas con su mundo. La situación laboral sobre la que he llamado la atención encaja en esta conceptualización.
      Cada uno de nosotros tiene que tomar postura ante la realidad que le ha tocado vivir, sospechar incluso de cosas tan inocentes como el sistema de propinas, de la forma de hacer política, de la distribución de la riqueza, de la marginación por motivos de sexo, edad, religión, incluso de las promesas del status quo.
Por lo pronto yo no haré caso del grillo moralizador que se ha disfrazado de conciencia y dejaré de hacer lo que corresponde a las empresas.



¿LOS CLÁSICOS SON UN TEMA DE EDUCACIÓN?


Autora: Nora Guajardo
Publicado: La Primera de Puebla, 23 de noviembre de 2011

     Cuando menciono a los Clásicos,  se puede entender de diferentes maneras, tales como por ejemplo, los clásicos de la literatura, los clásicos de la música, los clásicos del rock, etc., pero en esta ocasión no me refiero a ninguno de esos clásicos, más bien aludo a lo siguiente:
     El clásico que…
… se cuela en la fila ante la gente que ha esperado por horas
… toca el claxon cuando se pone la luz verde y está veinte autos atrás
… cuando pones la direccional para pera pedir el paso, acelera para no dejarte pasar
… si vas en auto, te toca la bocina y te recuerda que tienes mamá si osas dar el paso a alguien
… se molesta cuando le mencionas que se equivocó al darte el cambio, sólo que le devuelves el dinero que te dio de más y se pone frenético en lugar de agradecer…
… maltrata su auto y se pasa el tope a gran velocidad pero no te deja pasar, muere en el intento antes que ser cortés…
… tira la basura por la ventanilla del auto porque no le gusta tenerlo sucio, lo que pase fuera, le tiene sin cuidado…
… cuando estás esperando el transporte público por un largo tiempo, pasan hasta tres autobuses juntos y ninguno se para porque van jugando carreras o el otro le puede “ganar el pasaje”…

     Lo anterior son sólo algunos de tantos ejemplos de la sociedad en la que vivimos y así como estos, se pueden mencionar una lista que no parece tener fin.
     Ante esta falta de respeto, de tolerancia, de una convivencia armónica, ¿cómo convivir con un mínimo de respeto, tolerancia, solidaridad, justicia, responsabilidad, con una actitud de diálogo pasivo, bajo unas normas mínimas de convivencia?, ¿cómo aprender a vivir juntos?, ¿cómo construir un proyecto común de sociedad que nos permita vivir solidariamente?, ¿cómo asumir la responsabilidad  consigo mismos y con los demás?
Se presume que el sistema educativo tiene como uno de sus objetivos preparar al sujeto para que participe activamente a lo largo de su vida en un proyecto de sociedad, enseñándole sus derechos pero también sus deberes y desarrollando ciertas competencias sociales que debe asumir en el trato con el otro en su vida cotidiana y ser “un buen ciudadano”.  Y si un buen número de ciudadanos pasamos por la escuela, ¿en dónde es que se pierde el rumbo?
     Pero, ¿cómo podemos aprender a vivir con los demás? Uno de los puntos importantes para aprender a vivir con los demás, indica Delors[1], es que el descubrimiento del otro pasa por el conocimiento de uno mismo, por ello, “para desarrollar en el niño y en el adolescente una visión cabal de mundo”, la educación, si se imparte por la familia, la comunidad o por la escuela, debe enseñarle a descubrir quién es. De esta manera “podrá realmente ponerse en el lugar de los demás y comprender sus reacciones”. Fomentar la empatía en la escuela, favorecerá los comportamientos sociales a lo largo de la vida. El reconocer al otro, el ejercicio del diálogo e intercambiar argumentos son instrumentos que pueden ayudar a una mejor convivencia.
         Retomando el título de este artículo, podemos afirmar que efectivamente, este tipo de “clásicos” son tema de educación, sobre todo de una educación en valores, de una ética cívica que nos permita convivir armónica y solidariamente y construir proyectos para tender hacia objetivos comunes, es decir, hacer verdadera comunidad.
La educación cívica constituye para el sujeto un conjunto de valores, conocimientos y prácticas de participación en la vida social. Cortina[2] habla de unos valores mínimos de la ética cívica para lograr convivir pacíficamente: la libertad, la igualdad, la solidaridad, la tolerancia, el diálogo.
      Para construir juntos una convivencia social justa, Martínez[3] menciona que se debe garantizar una “sociedad abierta, pluralista, equitativa y sostenible, en la que sean respetados unos principios éticos básicos por parte de todos los grupos que conforman la sociedad plural” en donde se promuevan valores básicos que permitan una convivencia en el respeto mutuo, tales como el respeto activo, la libertad, la igualdad, la solidaridad y la actitud de diálogo.
     Ejercer la ética cívica permite compartir valores que cada uno de los diferentes grupos puede mantener desde su propia visión y avanzar hacia una mejor convivencia, hacia una  mayor justicia social.
     ¿Cuándo estaremos listos para vivir juntos, sin ofendernos, sin violentarnos, haciendo uso de un mínimo de educación?, más aún, ¿queremos hacerlo?



[1] Delors, J. (1997), La educación encierra un tesoro. México: El Correo de la UNESCO. Pp. 99.
[2] Cortina, A. (2000). Ética. Madrid, España: Santillana.
[3] Martínez, E. (2010). Ética profesional de los profesores. Bilbao, España: Desclée De Brrouwer-Unijes

Sobre las ventas nocturnas


Autor: Alexis Vera, datos del autor haz click aquí
Publicado: Síntesis Puebla, 13 de noviembre de 2011

     Este es el mes de las ventas nocturnas, de las rebajas especiales, de los meses sin intereses, del compre hoy y ahí a ver después cómo nos paga (¡aunque ni crea que se la vamos a perdonar!). Todas las tiendas, en especial las grandes y más caras, ponen su mejor cara para recibir a la gente que, aunque no está segura de lo que realmente necesita, asiste a ver qué encuentra. El chiste es gastar el dinero que se tiene y el que no se tiene también. El ahorro es una palabra sucia en nuestra cultura.
     ¿Qué tratamos de compensar cuando gastamos sin mesura? ¿En el fondo qué nos está haciendo falta que buscamos cubrirlo comprando? Gastar dinero y comprar cosas superfluas (no básicas) creo que puede no estar mal (depende, en gran medida, del sentido que le demos  a lo que se compra). Me parece, sin embargo, que el problema en realidad es llevar las compras al extremo: comprar hasta que se me acabe todo el dinero que tengo; ningún guardadito por si las emergencias. Y comprar sin sentido, es decir, sin propósito alguno, sólo por gastar. En realidad las compras nos deberían ayudar a tener una mejor calidad de vida, y ésta no está en función de cuántas cosas se tienen sino de cómo se vive. El sentido de las compras debería ser, entonces, mejorar la existencia. Sin embargo, aunque dicen que comprar resulta más barato que ir al psicólogo, creo que en realidad pocas compras nos ayudan a mejorar nuestro estado permanente de ánimo; nuestra paz interior y, por lo tanto, nuestras relaciones con los demás. Generalmente sí le “inyectan” positivismo al momento y el efecto puede variar en su duración. Pero, a la larga, el efecto se va desvaneciendo y regresamos a la cruda realidad tarde o temprano.
     Antes de ir a las tiendas con la cartera desenvainada yo me preguntaría ¿qué voy a comprar y para qué? ¿Cómo va a mejorar esta compra mi dicha más profunda y mis relaciones con los demás? ¿Realmente mejorará mi calidad de vida? ¿Cómo?
Tal vez usted llegue a descubrir que la calidad de vida se puede mejorar sin comprar tantas cosas. Inténtelo y verá.

La Jatropha Curcas. Una opción poblana


Autor: Oscar García Gómez   
Publicado: e-consulta, 23 de noviembre de 2011


     En los últimos años han venido apareciendo noticias a nivel nacional relacionadas con el uso el biodiesel como combustible, así el presidente de la República Mexicana, anunció el 28 de noviembre de 2010 la puesta en marcha de una planta productora de biodiesel en la zona industrial de Puerto Chiapas, en el estado de Chiapas. Esta planta inicio con una capacidad de producción de 20,000 litros diarios con la posibilidad de ampliar su producción hasta 10 veces la inicial y se planteó que dicho biocombustible fuese utilizado por los autobuses que forman parte del sistema de transporte chiapaneco. En la nota se informaba que una semilla conocida como Jatropha Curcas era la materia prima que se utilizaba para la obtención del aceite que posteriormente era transformado en biodiesel.
      En abril de 2011 funcionarios de la línea de aviación Interjet y Airbus volaron en un avión de la ciudad del Distrito Federal a la de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, el cual utilizaba en uno de sus motores una mezcla de biodiesel y turbosina.
      La semilla de la Jatropha Curcas proviene de un arbusto el cual es utilizado en algunas regiones como cerca viva, alcanza hasta los 8 metros de altura, es resistente a la sequía y a las altas temperaturas, se reproduce por esqueje y crece en terrenos arenosos y erosionados.
      Esta semilla ha acaparado la atención de investigadores nacionales y extranjeros debido a su alto contenido en aceite, según el Dr. Jorge Martínez investigador del Centro de Desarrollo de Productos Bióticos del Instituto Politécnico Nacional, en su artículo Agroclimatic Conditions, Chemical and Nutritional Characterization of Different Provenances of Jatropha Curcas L. from Mexico, la semilla cuenta entre el 46 y 64% de su peso en aceite y entre un 18 y 33% en proteína.
      La semilla de la Jatropha Curcas se encuentra ampliamente distribuida en varios estados de la república mexicana como Puebla, Sonora, San Luis Potosí, Jalisco, Morelos, Guerrero, Veracruz, Oaxaca, Michoacán, Sinaloa, Chiapas, Yucatán, Quintana Roo, Tamaulipas, Hidalgo y Tabasco, recibiendo diferentes nombres de acuerdo al estado en el que se encuentre, algunos de ellos son piñón mexicano, piñoncillo, piñón, achsti, sikil-te y Cohuall en la sierra nororiental de Puebla.
      Los investigadores Maricela Rodríguez Acosta y colaboradores, quienes laboran en el Herbario y Jardín Botánico de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, en su artículo "Distribución del género Jatropha (Euphorbiaceae) en el estado de Puebla, México" aseguran que en la entidad poblana se encuentran 11 especies de Jatropha, lo que representa el 24% de las ubicadas en México, las cuales se encuentran distribuidas en la Sierra Madre del Sur (la cuenca del Balsas o en el valle de Tehuacán-Cuicatlán), el Eje Neovolcánico y Sierra Madre Oriental; 10 de las 11 especies localizadas en la entidad poblana son endémicas, únicamente la Jatropha Curcas se puede situar en otros estados de la República Mexicana, centro y Sudamérica.
     La Jatropha Curcas, en la entidad poblana, se localiza en la Sierra Madre Oriental, especialmente en las localidades de Cuetzalan, Kapola, Huitzilan, entre otros y desde años ancestrales esta semilla se ha utilizado, después de haber sido tostada, como condimento en guisos.
     Diferentes instituciones de educación superior ubicadas en la entidad poblana se encuentran realizando investigación sobre procesos de obtención de biodiesel, tal es el caso de la Facultad de Ingeniería Química, el Departamento de Zeolitas y en la Facultad de Ciencias Químicas pertenecientes a la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Otras instituciones que también están incursionando en este campo de investigación es la Universidad de las Américas Puebla, la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla y la
Universidad Iberoamericana Puebla.
     De acuerdo con la información presentada existen las condiciones favorables para que el estado poblano se convierta en líder en investigación y desarrollo de tecnología para la obtención de este biocombustible. Existe un interés genuino, en diferentes instituciones educativas, por realizar investigación en este sentido y por si fuera poco se cuenta con investigadores con experiencia en este ámbito, además se cuenta con diferentes especies de Jatropha nativas, las cuales podrían utilizarse como materia prima. Desde mi perspectiva hace falta un elemento conector que permita integrar los esfuerzos que se realizan en diferentes instituciones de manera desvinculada. En este sentido el elemento integrador puede estar constituido por la dupla empresa-gobierno. Es importante mencionar que en un pasado cercano hubo intentos por organizar los diferentes esfuerzos académicos a partir de la convocatoria de una ONG que aporta ayuda al campo. En cuanto al gobierno, sería plausible la existencia de programas puntuales que promovieran la investigación en cuanto a la pertinencia social, económica, ambiental y técnica del sembrado intensivo de la Jatropha de esta planta, así como la investigación en el ámbito del desarrollo de procesos ambientalmente amigables.



viernes, noviembre 18, 2011

Defensa del campo, un asunto de todos


Autora: Marcela Ibarra Mateos
Publicado: Puebla on Line, 16 de noviembre de 2011


     La grave situación del campo mexicano no es una novedad. Históricamente las formas de organización y las culturas de los diversos grupos indígenas y campesinas en nuestro país fueron pisoteadas e invisibilizadas por conquistadores, caciques y otras actores resultado del racismo en el que la cultura mexicana se fundó, pero también del ansia de detentar un poder absoluto. 
     Si bien hoy en día, esta situación prevalece, no podemos obviar que hay elementos que han exacerbado esta condición histórica. En el contexto actual la condición de campesinos e indígenas no es un problema local; se trata de una exclusión a nivel mundial, vinculada a la presencia de empresas transnacionales que imponen formas de producción basadas en un eficientismo ciego buscando la máxima ganancia y pisando la vocación de las tierras, la historia de los pueblos y los derechos humanos de quienes trabajan esas tierras. Este escenario ha sido promovido desde el Banco Mundial apoyando a gobiernos nacionales para que implementen y diseñen políticas públicas que permitan la intervención de agentes trasnacionales en procesos productivos. En este sentido, los gobiernos han jugado un papel fundamental en estos despojos, y consecuentemente los marcos jurídicos vigentes no funcionan para defender a aquellos que son agredidos y violentados por agentes económicos y políticos externos e internos a sus países.
      Esta orientación de las políticas dirigidas al campo no solamente han afectado las condiciones de vida de los campesinos. También han desestructurado la producción alimentaria de los mercados internos, han contribuido a la destrucción y apropiación privada de los recursos naturales y han detonado procesos de migración con la consecuente pérdida de población productiva en zonas rurales y también en el deterioro de la vida de las familias, niños, jóvenes, mujeres y adultos mayores.
      Encontramos innumerables casos que ilustran estos graves procesos de deterioro ambiental y que solo han generado el enriquecimiento de unos pocos. En México, la destrucción de las selvas en Tabasco y el saqueo de maderas preciosas desde la década de los cuarenta; la explotación minera contaminante y la presencia de agroindustrias de tomate en la zona conocida como Wuirikuta, que afectan a los por indígenas huicholes que la habitan; las condiciones que vive hoy Cuatro Ciénegas en la Comarca Lagunera; los manglares en las costas del Caribe y Pacífico amenazadas por los desarrollos turísticos; los megaproyectos portuario y hoteleros en Baja California, entre muchos otros.
      Ante esta situación, los campesinos e indígenas como sujetos sociales están haciendo grandes esfuerzos de organización local y transnacional para defender sus derechos. Investigadores, organizaciones sociales y otros actores, promueven y apoyan estas iniciativas, buscando defender formas organizativas distintas que permiten no solamente el cuidado ambiental sino también promover formas justas y dignas de vida para todos. Para ello promueven una fuerte presencia del estado que controle los procesos tecnológicos industriales, que busque acuerdos comunitarios que beneficien a la mayoría y no solo a unos cuantos. Proponen una reforma agraria cuya base sea la soberanía alimentaria de los países –incluyendo la soberanía de las semillas- que nadie dependa de ningún otro país para alimentarse. Y plantean una revolución agroecológica como herramienta fundamental contra el cambio climático, evitando la agroindustria contaminante
      Algunas de estas movilizaciones se han vinculado a la Vía Campesina en Movimiento que se reunirá en Sélingué, Mali del 17 al 19 de noviembre de 2011, y reunirá a más de 200 campesinos e indígenas de todas partes del mundo, particularmente los afectados por el acaparamiento de tierras. Este movimiento busca generar conciencia y difundir nuevas formas productivas.
      La defensa del campo, de los campesinos y de los indígenas es una lucha de todos. Es una lucha por nuestra propia alimentación, por nuestra sobrevivencia. La sobreexplotación de tierras y la dependencia alimentaria limitan nuestra libertad y nuestra autonomía. Para ello, no todos tenemos que marchar con los manifestantes o pintar carteles o formar parte de la clase política que verdaderamente se preocupa por mejorar las condiciones de vida de las personas que representan. Revisar y replantear nuestros modos de vida, particularmente nuestro consumo y el uso que hacemos de los recursos sería una gran contribución a esta defensa de nuestra vida.

La Sociedad del Conocimiento: desafíos de educación y equidad.


Autora: Marisol Aguilar Mier
Publicado: e-consulta, 16 de noviembre de 2011

     Los tiempos que vivimos, sin duda alguna, son complejos pues las maneras en las que el conocimiento se genera y la información se procesa, se acumula y se difunde se han transformado generando nuevas estructuras sociales, económicas y culturales debido a una revolución tecnológica sin precedentes. Puede decirse que vivimos colmados de datos, imágenes, frases e íconos que han modificado la percepción que tenemos de nosotros mismos, pues ha cambiado también la apreciación que tenemos de nuestro entorno. Nuestra mirada ha ido de lo local acotada por nuestro barrio o ciudad, hacia horizontes globales pues se han roto los límites para acceder al conocimiento, producirlo e intercambiarlo colectivamente, al eliminarse barreras geográficas y temporales-espaciales y al tener un acceso más directo y “sin filtros” a la información y a lo que acontece.
     Lo anterior, constituye un enorme desafío pues se requiere de una ciudadanía que pueda acceder a una enseñanza de calidad y a los diversos medios de comunicación para participar plenamente en las sociedades del conocimiento y contribuir de forma eficaz a ellas. Y esto implica el desarrollo de competencias que nos permitan buscar, analizar, evaluar la información, aplicarla para solucionar problemas y tomar decisiones, siendo usuarios creativos que sacan el mayor provecho de las Tecnologías de Información y      Comunicación (TIC) en ámbitos laborales, personales y sociales.
     De acuerdo con la UNESCO, un objetivo clave para los próximos años es “incrementar la productividad, formando estudiantes, ciudadanos y trabajadores que se comprometan continuamente con la tarea de generar conocimiento e innovar y que se beneficien tanto de la creación de este conocimiento como de la innovación”. Nos preguntamos entonces, ¿qué tan cerca estamos de alcanzar este objetivo?
     Hay que reconocer, en primer lugar, que si bien estas nuevas sociedades han traído consigo múltiples beneficios en todos los ámbitos, también han generado nuevas formas de exclusión social relacionadas con el conocimiento puesto que al menos en nuestro país, aproximadamente sólo un 22% de la población tiene acceso a Internet. No contamos con la infraestructura ni los recursos suficientes para generar las plataformas que permitan equidad en el uso y acceso a los medios de comunicación e información y al desarrollo de los conocimientos especializados que se requieren para participar efectivamente en dichas sociedades.
     De esta manera, corremos el riesgo de quedarnos fuera, o mejor dicho “off line” de una nueva élite con serias repercusiones en nuestra calidad de vida y con pocas posibilidades para ser escuchados y participar tanto en la producción de nuevo conocimiento como en la aplicación del conocimiento ya existente para un mayor progreso y desarrollo.
     Así pues, comienza a crearse una nueva hegemonía en donde, según la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información (CMSI), el conocimiento se está transformando en un recurso privado que puede ser controlado, vendido y comprado, como si se tratara de una simple mercancía y no de un elemento fundamental de la organización y el desarrollo social. Con ello se genera un núcleo de poder que controla la información, que puede decir qué es cierto y qué no y que de alguna manera impone un estilo de vida y una forma de pensamiento particular.
    Por todo lo anterior, nuestro país enfrenta un enorme desafío en esta materia pues requerimos trabajar arduamente para lograr dicha equidad en el acceso a las TIC. No obstante, ahí no termina el reto pues las escuelas pueden estar dotadas de la más alta tecnología pero sin profesores capacitados para integrarlas a los procesos educativos, éstas seguirán siendo presentadas desde la mirada del cambio y de la innovación, pero usándose de forma completamente tradicional sin modificar ni alterar metodologías y concepciones educativas. Tampoco lograrán aportar al desarrollo de competencias digitales que implican, entre otras cosas un conjunto de habilidades sociocognitivas mediante las cuales se puede seleccionar, analizar e informar del proceso de transformación de información a conocimiento.
     Concluyendo, podemos decir que las TIC son sólo un medio pues pueden estar presentes pero si no hay usuarios competentes que le den un sentido, no se conseguirán muchos cambios pues el fin último, está en la educación de las personas para que éstas puedan desenvolverse y participar como sujetos activos, críticos, innovadores, éticos y responsables, en una sociedad cada vez más compleja, rica en información y basada en el conocimiento.

Realidad nacional e ideales universitarios


Autora: Ma. Isabel Royo Sorrosal
Publicado: e-consulta, 04 de noviembre de 2011

     El filme alemán La Rosa Blanca fue candidato al Oscar como mejor película extranjera en 2006. Se basa en los últimos días de los hermanos Sophie y Hans Scholl, jóvenes alemanes de 21 y 24 años, estudiantes en Universidad de Múnich que realizan acciones pacíficas contra el régimen de Hitler. Trata de los ideales juveniles frente al terror desatado por el nacionalsocialismo. Los jóvenes expresaban en su sexto manifiesto distribuido por la universidad, “nos importa la ciencia verdadera y la genuina libertad del espíritu… se trata de la lucha de cada uno de nosotros por nuestro futuro, por nuestra libertad, y por nuestro honor”. Solo se precisó cinco días para ser aprehendidos, juzgados y ejecutados en febrero de 1943.
     Volvemos a reflexionar y profundizar en la función social de la universidad. Su ubicación en la realidad concreta nacional y mundial, demanda responder a las necesidades de la vida concreta de las personas y sociedades desde las características propias de la educación superior: investigar, enseñar y diseminar. Se trata de conocer quiénes somos, en qué realidad estamos y hacia dónde queremos ir, al precio que sea necesario.
     En una conferencia del pasado septiembre en la
Universidad Iberoamericana Ciudad de México, el P. Raúl Vera –obispo de Saltillo- señalaba una prerrogativa consciente o no, que goza la institución universitaria: operar por proyectos. El proyecto es algo que nos lanza hacia delante, y proceder de acuerdo a ello es un caminar de manera concienzuda hacia una meta. Tener un rumbo, evitar contradicciones, guiados por el uso de la razón abierta a la intuición, son características del ser universitario. En el mismo foro, el rector de la institución maestro José Morales apuntó algunos rasgos de la realidad nacional en la que estamos inmersos, entre ellos: la impunidad en el ámbito jurídico, la complicidad de la autoridad policial, el lavado de dinero por medio de instituciones bancarias, la ausencia de espacios y salidas para los jóvenes, y los altos niveles de violencia tanto personal como social.
      Si conocemos quiénes somos y dónde estamos, todavía nos queda definir qué queremos o nos importa y qué estamos dispuestos a comprometer por ello cada uno de nosotros. No cabe duda que nuestro objetivo es hacer bien y mejor cada día lo relacionado con la generación de conocimiento y la formación de profesionales para la sociedad en que vivimos; éstas son funciones prioritarias que no podemos abandonar, y llevarlas a cabo tiene características fundamentales. Entre los rasgos que podemos destacar señalamos la colaboración entre instituciones educativas y de ellas con diferentes sectores de la sociedad. Las vinculaciones son enlaces que fortalecen a las entidades al relacionarlas con la realidad en la que se ubican. Otro rasgo es el compromiso con los jóvenes para favorecer su incorporación y desarrollo en la economía, política, y la sociedad en general que nos lleva a pensar y trabajar para, con y desde ellos. Finalmente, la génesis del conocimiento y propuestas de alternativa a los problemas actuales han de beneficiar a las grandes mayorías de excluidos, por humanidad y por prevención de problemas mayores.
      Acometer estas funciones con sus rasgos para impactar en la realidad nacional requiere algunas decisiones difíciles de mantener, entre las que destacamos: vivir el presente con todas sus novedades y riesgos, resistir los embates de la vida en sus diversos ámbitos, preparar personas y comunidades para la convivencia en paz, y buscar abiertamente las fallas internas de los sujetos individuales y colectivos para la mejora. Estas decisiones miran al futuro desde una libertad que reconoce nuestro presente con sus debilidades, y que desea construir una convivencia nueva y vigorosa basada en el respeto mutuo, la honestidad personal e institucional y la inclusión de todos.
      Los ideales son generadores de fuerza e iluminan las trayectorias a seguir. Su poder se mide por la capacidad de cambiar procesos, costumbres y vidas sujetas a inercias. Por ello seguir ideales implica cambios, tener la valentía de hacerlos asumiendo riesgos, y dejar atrás la facilidad de lo conocido y la rutina. ¿Somos conscientes de los ideales que tenemos en las universidades? ¿Qué poder tienen y qué estamos dispuestos a arriesgar por ellos?

Las habilidades directivas; pieza clave en la gestión organizacional


  Autora: Rocío Barragán de la Parra, datos del autor haz click aquí
Publicado: en Lado B, 15 de noviembre de 2011

     Hoy en día el paradigma de las relaciones personales o empresariales, formales o casuales está fundamentada, como desde hace miles de años en la capacidad que cada ser humano tiene para relacionarse consigo mismo, con el entorno y con los demás. Las relaciones son una tarea compleja, se desarrollan de manera más intuitiva que consciente y en ellas se encuentran algunas de las respuestas fundamentales sobre la convivencia, el acompañamiento personal, organizacional y social.
     Las habilidades directivas son piezas clave para la gestión organizacional, cualquier líder que tenga a su cargo un grupo de personas y una encomienda, debe tener la capacidad de orientar y promover el desarrollo de su equipo a la par de los objetivos empresariales. Para ello debe considerar la filosofía empresarial, su estilo de liderazgo y la personalidad de cada uno de los miembros de su equipo.
     Un líder contemporáneo es capaz de influir en el ánimo del equipo, es creativo y flexible sin perder de vista que el sentido fundamental de su trabajo está en la  posibilidad de promover conductas cognitivas y emocionales que coadyuven en lo general a la ejecución de tareas comunes y en lo particular, al desarrollo de personas capaces de relacionarse mejor con su realidad; de percibir e interacturar de manera más ecológica, ética y sustentable con su entorno y sus semejantes.
Un gerente o director empresarial es responsable de un equipo de personas y asume que su encomienda es acompañar a los demás, generar comunicación interpersonal asertiva, desarrollar equipos, tomar decisiones participativas y, en su caso, gestionar conflictos; se compromete a contribuir en y con la construcción de relaciones e intereses de los miembros de una organización.
     Tradicionalmente se definen como habilidades gerenciales el manejo de recursos humanos, gestión de tiempo y de proyectos, capacidad de análisis y negociación, trabajo en equipo y toma de decisiones. Todas estas competencias son trascendentales para una organización, sin embargo en los últimos años se ha reorientado el enfoque de la gestión organizacional al considerar que el talento humano es su principio activo, llamado también capital intelectual y base de la productividad de la empresa.
     En este enfoque directivo  y estratégico la finalidad es obtener el máximo valor para todos los participantes: Empresa, empleados, accionistas, consumidores y sociedad. Esta visión se fundamenta en desarrollar acciones para potencializar las capacidades del personal, sumar voluntades y compromisos para la consecución de los objetivos personales y empresariales.
Entre las  habilidades directivas destacan:
Escucha activa y asertiva
Compromiso e interés genuino por y con los demás
Honestidad
Flexibilidad
Madurez y objetividad
     La escucha atenta y asertiva  permite identificar lo que el otro necesita, cuál es el enfoque o la percepción de su entorno y su realidad. Cuando se escucha activamente se puede acompañar  a los otros de mejor manera, propiciar en las acciones no sólo los objetivos laborales sino también la realización y el desarrollo de los colaboradores. La escucha asertiva permite tomar mejores decisiones y contribuir a un clima laboral de respeto, confianza y crecimiento.
Si hay un interés y compromiso por los demás el desarrollo personal y laboral se potencia, se aprovechan de mejor manera los talentos, cualidades y habilidades, se teje la relación social privilegiando la aportación de cada miembro del equipo.
Sin honestidad no hay interés genuino ni compromiso, es el filtro que permite tener relaciones sanas, transparentes y maduras,  a través de la honestidad los miembros de un equipo pueden reconocerse en los éxitos y en los fracasos, en la bonanza y en la dificultad; se tiende un puente de  apertura para identificar obstáculos y limitaciones, insumo clave para la mejora continua.
     Hoy en día, en una sociedad egoísta, hedonista, materialista, nihilista, la flexibilidad para entender y respetar al otro en su realidad, en su integralidad;  es fundamental para construir relaciones sanas y conseguir de manera más clara y satisfactoria los objetivos de un equipo. Esto supone respetar preferencias políticas, religiosas, sexuales y económicas aprendiendo y valorando otros enfoques personales y profesionales. Potencializar las capacidades compartidas en la diversidad para caminar al genuino interés y compromiso por los otros.
     El reto para los directivos o gerentes que acompañan y forman parte de grupos de trabajo consiste en estar cerca de las personas, con la suficiente distancia para permitirles trabajar y desenvolverse autónomamente; con sensibilidad para propiciar espacios  de crecimiento y acompañamiento, pero con firmeza y claridad para tener presentes los objetivos por alcanzar. Por su parte las empresas enfrentan el desafío de desarrollar líderes que, a través de sus habilidades sean capaces de gestionar el talento humano y la consecución de los objetivos comunes.