martes, mayo 17, 2011

Formación de los profesionales de la salud

Autor: Gonzalo Inguanzo Arteaga
Publicado: La Primera de Puebla, 11 de mayo de 2011
     Reconocidos académicos, entre los que se puede señalar al decano de Medicina de la Universidad de Harvard y ex secretario de salud de México, Julio Frenk, piden mejoras en la formación de los profesionales de la salud de todo el mundo. Por su parte, estudios que se han venido publicando en los últimos meses mencionan que se le debe dar más importancia a la formación de este tipo de profesionales y se sugieren reformas institucionales y educativas que abarquen tanto sus estudios como su formación continua.
     Se señala que las instituciones educativas como formadoras de recursos humanos deben estar atentas a los cambios que se dan en su entorno, de esta forma se estará apostando por la pertinencia del proceso educativo. Al entender la realidad y los retos que de su análisis se desprende, pueden ser capaces de proponer una formación de profesionales que permitan potenciar los procesos de cambios positivos en su comunidad.
     En este sentido, la formación del profesional de salud debe inscribirse en acciones que lo capaciten para promover a la salud como un imperativo ético, lo cual implica generar los espacios donde el concepto de calidad de vida y promoción de la salud sea discutido y reflexionado a través de un trabajo colaborativo de estudiantes y docentes. Por otro lado se debe facilitar la comprensión de la estrecha relación que existe entre salud y condiciones de vida, al tiempo que se debe enfatizar la responsabilidad social de los conocimientos y una consistente preparación humanista, ética y política.
     Otro elemento a considerar es que la preparación de profesionistas de la salud debe dejar en claro la importancia del trabajo interdisciplinar, los futuros profesionistas deben tener habilidades que les permitan ser eficientes como miembros de organizaciones, trabajar en equipo con otros profesionales de la salud y otras disciplinas.
     No menos importante es preparar al profesional para que en su práctica involucre de manera creativa y efectiva todas aquellas herramientas que posibiliten el cambio de los beneficiarios de las instituciones de la salud a estilos de vida más saludables.
     El logro de los elementos anteriormente señalados no se encuentra presente en sí mismo en la propuesta curricular visible que se le propone a estudiante, sino que se fundamenta en lo que se denomina currículo oculto, entendiéndose éste como un espacio en donde cada universidad o institución educativa contribuye a la generación de espacios de eticidad en los que los valores de la vida humana se hacen viables, se implica con los ideales sociales, al tiempo que transforma a los actores que participan de las experiencias formativas.
     En la interacción que se da cada día por parte del estudiante con la institución educativa y con los espacios de práctica profesional (hospitales, laboratorios, comunidades a los que se asiste, etc.) se define el clima formativo y se hace posible un compromiso vivencial de alta significancia con la promoción de la salud. El profesionista en formación se comprometerá con los altos ideales en la medida que los espacios en los que se está formando lo involucren con vivencias éticas e intelectuales que le permitan identificarse y comprometerse en prácticas específicas y valores determinados.
     Estos valores serán adoptados por el estudiante dependiendo del rostro que les presenta la universidad o institución en la que se forma, de la coherencia entre lo que se pide hacer por la institución y lo que ella misma demuestra en sus acciones, de las vivencias de reflexión y acción que tenga al lado de sus maestros, así como de la capacidad de análisis y toma de decisiones que su paso por la institución le haya permitido desarrollar y potenciar.
     Es importante que las instituciones educativas, en especial las universidades, asuman la responsabilidad que les compete en el proceso como formadora de profesionales y ciudadanos que lideren procesos de cambio en la sociedad en la cual están insertas. Se debe aceptar que existe una corresponsabilidad y que el trabajo de recuperación de la salud en condiciones de equidad, oportunidad y calidad es imprescindible para cualquier sociedad.

No hay comentarios.: